lunes, 18 de abril de 2011

De consejos y elogios

Estuve hablando por varios minutos, cuando finalmente terminé su cara fue indescriptible. Fue de esas caras que a uno le da incluso miedo preguntar qué significan, pero ella era mi amiga (o algo así) y necesitaba saber su opinión. Tenía miedo de lo que podía decirme, de que me desaprobará o que pensará que era una ridícula. Sabía que sus palabras podían sin demasiado esfuerzo hacer que me arrepintiese inmediatamente de lo que había hecho. Se quedó callada unos minutos (o al menos eso pareció, quizás hayan sido segundos nada más) y sonriendo me dijo “o estás loca o estás enamorada”.  A lo que respondí con otra sonrisa, pues con cualquiera de las dos opciones soy feliz.

1 comentario: